ABRIR LA PUERTA A DIOS
Fritz y Sophie, son novios,
"Pasean, hablan, rezan juntos. Los meses de guerra han ido aquilatando su amor, haciéndolo más auténtico.
Pero, para Sophie, todo es poco:
'He comprendido que cuando amo a una persona no puedo hacer nada más hermoso que incluirla en mi oración.
Si amo a una persona con toda mi buena voluntad,
la amo según la voluntad de Dios.
¿Qué puedo hacer, entonces, mejor que ir hacia Dios con este amor?
Quiera Dios que yo pueda aprender a amar a Fritz en su nombre'
(Diario, 12-XII-1941)"
(Lucas Buch: ¿Por qué sonríes siempre?, Edit RIALP, p. 113)
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